José

En noviembre, compartimos la historia de nuestro cliente José de Nicaragua, que había sido detenido injustamente en una prisión de inmigración ICE durante 13 meses - atrapado en el limbo legal cruel a la suma de más de $ 60.000 dólares de los contribuyentes.

José no pudo conseguir ayuda en EE.UU. ni regresar a su país, rechazado por Nicaragua por no estar registrado con un certificado de nacimiento, algo que ocurre entre el 15% y el 35% de los niños que nacen cada año en el país. Sin salida ni acceso a la familia, permaneció sometido a la tortura mental y física de la custodia del ICE, con el riesgo de caer entre las grietas de nuestro sistema de inmigración. (Su historia figura a continuación).

Un mes después, nos complace compartir que José ha sido puesto en libertad gracias a la hábil y firme defensa de los clientes que ha hecho posible nuestra comunidad de aliados.

Gracias a quienes nos apoyan, RAICES pudo concentrarse en lo que más importa: el trabajo significativo que tenemos por delante en defensa de José. Gracias a ustedes.


28 de noviembre

José lleva 13 meses en la cárcel de inmigrantes del ICE, sin final a la vista.

Es una de las 6.000 personas que actualmente confían en RAICES para defender su libertad y su seguridad, y sus servicios se financian íntegramente mediante crowdfunding.

¿Por qué compartimos su historia? Sencillamente, José es una de las miles de razones por las que nuestra defensa colectiva es imprescindible para las personas que dependen de RAICES.

José llegó a Estados Unidos huyendo de la persecución en Nicaragua con la esperanza de obtener protección de asilo.

Las mismas protecciones que han sido desmanteladas durante el último año y que están totalmente amenazadas durante las actuales negociaciones bipartidistas en el Congreso. Su caso, como el de tantos otros en un estado en el que sólo el 4% de las personas en procedimientos judiciales de inmigración han conseguido la ayuda en los últimos 25 años, fue denegado y se le abrió un procedimiento de deportación.

Se preguntarán, ¿por qué está José detenido si se suponía que iba a ser deportado? Porque Nicaragua se niega a aceptarlo. Nunca le registraron con un certificado de nacimiento, algo que ocurre entre el 15% y el 35% de los niños que nacen cada año en Nicaragua.

José ha estado en un cruel limbo legal - incapaz de regresar a casa, o de conseguir asilo en los EE.UU. Así es, más de 60.000 dólares de nuestros contribuyentes se han gastado en los últimos 13 meses para mantenerlo en la prisión de inmigración del ICE.

No hay nadie más que luche por la libertad de José, excepto nuestros abogados y defensores de los clientes, que abogan ferozmente por su libertad. Si damos la espalda, ¿quién luchará por José y por los que son como él?

La experiencia de José es un recordatorio aleccionador de por qué estamos en esta lucha por un sistema de inmigración humano y de los años de búsqueda de la justicia que a veces nunca se logra, incluso cuando desafía el sentido común. Como el mayor proveedor de servicios legales de inmigración en Texas, RAICES cree en un modelo de representación universal - tomar casos sin importar la probabilidad de éxito en el tribunal de inmigración.

Luchamos sin descanso por la libertad y la seguridad de nuestros clientes, pero sólo podemos hacerlo porque contamos con una comunidad de simpatizantes que hacen posible este trabajo. Contando con un sistema nacional de inmigración diseñado para infligir dolor, nuestros clientes se encuentran entre el 22% de las personas en proceso de inmigración en Texas que tienen acceso a representación legal.

Nuestro compromiso se alimenta de su compromiso.

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